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RECURSOS NATURALES
de la escala y de una serie de factores
adicionales (si es propietario o arren-
datario, localización, tipos de suelo,
capacidad financiera, disponibilidad
de mano de obra, etc.). En general
cuanto más pequeño el predio mayor
porcentaje del área ocupará el módu-
lo (aunque no de manera lineal) y se
deberá tener en cuenta que la pérdida
del mismo por ocurrencia de eventos
extremos no desestabilice a la empre-
sa. El correcto dimensionamiento es
fundamental, evitando así aumentos
de producciones que lo único que
hacen es pagar los costos realizados.
Por eso la definición de este módulo
debe apoyarse en una detallada plani-
ficación del presupuesto forrajero en
el corto y largo plazo. Esto implica pro-
yectar las demandas del rodeo (con-
siderando las actividades incluidas en
el planteo del productor) y la oferta de
forraje del campo natural. Para esto
último disponer de estimaciones ba-
sadas en sensores remotos a nivel de
potrero y para períodos de varios años
es de suma importancia ya que permi-
te identificar la magnitud y momento
de los déficits forrajeros a cubrir con
suplementación o el MAPF. En forma
paralela todo esto será complemen-
tado con una correcta aplicación del
conjunto de tecnologías de manejo
animal en vacunos y ovinos, su corres-
pondiente mejora genética y sanidad.
Otras opciones que exploran la
multifuncionalidad del campo na-
tural
Además de la tradicional producción
de carne y lana también se pueden
instrumentar otras actividades, sobre
todo en pequeños productores gana-
deros, como ser la producción de cer-
dos, aves y huerta familiar. Aparecen
actualmente otro tipo de servicios y
productos no tradicionales. Ellos inclu-
yen el agroturismo, donde aspectos
culturales-históricos y de la naturaleza
pueden ser explorados. Agregar valor
a los productos generados ya sea por
su origen o por provenir de un ambien-
te determinado como “la carne produ-
cida a pasto” y finalmente la incorpo-
ración de nuevos productos como la
producción de energía (ej.: parques
eólicos, fotovoltaicos.)
Complementariamente a todo esto,
existe lo que se llaman servicios eco-
sistémicos que son aquellos benefi-
cios que la población obtiene de los
ecosistemas (control de la erosión,
provisión de agua limpia, regulación
del clima, polinización, etc.), que son
irremplazables una vez perdidos, pero
actualmente y en algunas situaciones
son sujetos de valoraciones y pagos.
Así es que, reconociendo la hete-
rogeneidad de situaciones a nivel
predial, en la ganadería extensiva no
existe una sola opción de intensifica-
ción sino que existen múltiples vías
que dependerán de las posibilidades
y ganas de asumir riesgos que tengan
los productores, de su edad, del tipo
de familia, del tipo de explotación y de
un sin número de otros factores de
diverso origen, como por ejemplo la
disponibilidad de tiempo.
En un proceso de intensificación,
la conservación y el manejo de las
pasturas naturales juegan un rol pre-
ponderante y será lo que nos permitirá
enfrentar la variabilidad del contexto
y diferenciar la producción uruguaya.
Capitalizar dicha diferencia y explo-
rar la multifuncionalidad de nuestros
campos es parte del desafío.
Agradecimientos: se aprecia y valora
la lectura y aportes realizados a este
artículo por parte de José Paruelo,
Mario Pauletti, Gervasio Piñeiro, Gus-
tavo Garibotto, Esteban Carriquiry,
Abner Prada, Rafael Gallinal y cuerpo
técnico del Plan Agropecuario.
Foto: Plan Agropecuario