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constante como en moneda corriente,
en 15 ejercicios; debe de recordarse
que este promedio general oculta las
variaciones de importancia entre zonas
y entre sistemas que analizamos ante-
riormente.
A pesar de este comportamiento cre-
ciente visualizado en el largo plazo, es
claro que en los últimos 3 ejercicios se
registra un importante descenso de los
ingresos en ambas monedas.
Sabido es que la actividad ganadera
es pasible de enfrentar eventos ad-
versos de diferente origen. Para este
ejercicio, nuevamente la adversidad
tiene dos orígenes. El primero de ellos,
el mercado, con una reducción del
precio de las haciendas vacunas por
tercer año consecutivo, tanto para los
predios ciclo completo como para los
predios criadores. El segundo de ellos,
el clima, con condiciones no del todo
favorables para la producción ganadera
(sequía-inundación-invierno temprano-
menor crecimiento de las pasturas). Es
claro que los impactos fueron diferen-
tes de acuerdo a la zona del país, no
obstante es posible afirmar que el cli-
ma no fue del todo favorable en líneas
generales para la producción ganadera.
Constatamos nuevamente que la for-
ma de responder de los sistemas de
producción frente a los eventos adver-
sos es muy diversa y particular de cada
uno. Volvemos a confirmar luego de va-
rios años de observación y análisis de
información objetiva, la identificación
de diversas asociaciones positivas a
nivel de empresas ganaderas en rela-
ción a las respuestas de los sistemas.
Una de esas asociaciones identificadas
es entre las decisiones tomadas por
los gestores de los sistemas y la res-
puesta de los mismos, los niveles de
variación y los resultados alcanzados.
Esas decisiones abarcan aspectos pro-
ductivos vinculados sobre todo al ma-
nejo de la carga animal, de la recría, del
rodeo de cría y del engorde. Estas con
una fuerte interrelación a cómo se de-
cide sobre la utilización de las pasturas
tanto naturales como sembradas. Es-
tas decisiones llevadas a campo, mate-
rializan sistemas de producción con de-
terminadas características en común,
al que hemos desde hace varios años
denominado “ganadería de precisión”.
Es claro que los recursos determinan
en gran medida las características de
los sistemas; no obstante este siste-
ma que hemos dado en llamar “gana-
dería de precisión” responde más a
características relacionadas a la toma
de decisiones que a los recursos pro-
piamente. Las decisiones oportunas y
con información objetiva en relación al
rodeo de cría, vinculadas con: dotación
animal, composición del stock, épocas
de entore y control de los mismos,
control de amamantamiento, alimen-
tación, sanidad y política de reemplazo
de hembras. Como también las de-
cisiones vinculadas con las pasturas
naturales e implantadas en diversos
aspectos: siembras, utilización, referti-
lizaciones, descansos, etc.
La variable carga–dotación animal
y las decisiones entorno a la misma,
son nuevamente uno de los aspectos
de mayor relevancia para el logro de
los objetivos propuestos. La carga-
dotación ajustada al alimento existente
dotan a estos sistemas de mayor sus-
tentabilidad y resiliencia.
Las características descritas, deter-
minan que estos sistemas posean un
“estilo común”, pero en la diversidad.
La impronta que cada productor le im-
prima, combinación de conocimiento
empírico y científico, generan en de-
finitiva empresas con determinadas
fortalezas. Las fortalezas que des-
tacan refieren a una mayor resisten-
cia a eventos adversos, una mayor
velocidad de recuperación luego de
recibir impactos negativos y un ma-
yor aprovechamiento de condiciones
externas favorables.
Otra vez en este ejercicio, y van?,
con adversidades de origen y mag-
nitud diferente, comprobamos ob-
jetivamente la mayor resiliencia y
sustentabilidad que presentan estos
sistemas. Por tanto nuestro conven-
cimiento de la conveniencia de re-
correr los caminos necesarios para
implantar sus características más
relevantes a nivel de las empresas
ganaderas. Además de las caracte-
rísticas ya señaladas, la capacidad
de gestión del mismo, por parte del
tomador de decisiones es de impor-
tancia superlativa. Las inversiones en
conocimiento que demandan estos
sistemas “ganadería de precisión”
así lo indican.
Para finalizar, es definitivamente
relevante que la toma de decisiones
con el objetivo de posicionar al sis-
tema de producción adecuadamente,
se realice con información objetiva
de las alternativas posibles, con de-
finición de prioridades y con cierta
dosis de prudencia y cautela.
Cómo los productores ganaderos
toman las decisiones en todos los ni-
veles (operativo-táctico-estratégico)
incide en gran medida sobre su desa-
rrollo sustentable, como así también
el cómo enfrentan-sortean eventos
adversos y por supuesto cómo apro-
vechan los eventos favorables.
Es claramente un desafío el hecho
de incorporar más productores, reco-
nociendo la diversidad de realidades,
a recorrer este camino de puesta en
práctica de esta forma de hacer ga-
nadería que denominamos “ganade-
ría de precisión”. El Plan Agropecuario
aporta permanentemente informa-
ción, conocimiento y capacitación
para un mejor posicionamiento de los
mismos frente a los nuevos desafíos
que a diario se les presentan.
ECONOMÍA Y MERCADOS
Foto: Plan Agropecuario