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El resultado productivo medido en este período arrojó, que los terneros pa-saron de 135,5 a 120 kg de Peso Vivo, determinando una pérdida promedio de 190 gramos /día representando ello la situación más típica de la región.

En esta etapa, los 34 terneros per-manecen en un solo lote, tal como lo sucedido en el período anterior. El día 1° de agosto, se establece un cambio drástico en el plano nutricio-nal de los animales que consiste en: a) Comenzar la suplementación de los mismos con una mezcla de grano de sorgo molido seco más un suplemen-to proteico, hasta alcanzar un nivel del 0.8 % del Peso Vivo.

El grano de sorgo, constituyó el 60 % del total del suplemento y el 40% restante lo aportó un alimento rico en proteína (ACTIBIOL, 25% PC); B) comenzar a pastorear un Campo natural, con forraje diferido desde el otoño, en un régimen de acceso res-tringido únicamente por las tardes. La disponibilidad inicial del potrero fue de 10 cm de pasto y la relación verde/seco estimada fue de 20/80.

Se debe tener presente que la muy alta proporción de pasto seco, impide la selección por parte de los animales y por ende la calidad de la pastura in-gerida limita seriamente el consumo animal. En estas condiciones, si los animales no hubieran sido suplemen-tados, se podrían haber registrado im-portantes pérdidas de peso. La superfcie del potrero era de 4,5 ha, por lo que durante este período pastorearon 7,5 terneros/ha. El monitoreo realizado sobre la evo-lución del Peso Vivo de los animales,

mostró que en este período, todo el lote ganó en promedio 330 gramos/día, pasando de 120 a 129 kg.

En la gráfca 2, se muestra la evolución del peso de los animales desde inicios de la prueba, hasta el fnal de la Etapa 2.

En este último tramo del ensayo, que coincide con el fn del período invernal, el grupo de 34 terneros, se dividió en 3 lotes, los cuales recibieron un trata-miento diferencial durante los siguien-tes 60 días.