jeron en frases y palabras como “compar-
tir”, “divertirme”, “disfrutar”, “aprender de
cada una”, “pasarlo bien” “hacer amigas“,
“compañerismo“, “amistad”, “comprensión”,
“conocer gente” “colaborar”, “dar y recibir”,
“experiencias lindas, jugar, reír”, “conocer-
nos más”, “diversión colectiva”, “llenarme
de hermosos recuerdos, “charlar”, “relajar-
me”, “salir de la rutina”, “historias de vida”,
“poder también dar lo mejor de mí”. Todas
ellas dejaban entrever muchas de las aspi-
raciones, deseos y necesidades de nuestras
acampantes.
Más tarde, se realizaron talleres simul-
táneos donde las participantes tuvieron
la oportunidad de elegir el espacio y la
temática de su interés; las propuestas
fueron capoeira, yoga, cuerpo holístico y
pilates.
Luego de estos talleres, pudimos cons-
tatar un clima de paz, alegría, intercambio
y reflexión colectiva, enriquecido con los
aportes de las experiencias particulares
de las acampantes en relación al tema.
Por la noche, se realizó el fogón. Sin
dudas, un momento significativo del cam-
pamento, con el encendido colectivo de
propósitos elaborados por los grupos,
emotivos desde lo personal y grupal. Ade-
más, se compartieron canciones, danzas y
representaciones.
La segunda jornada, luego del desayu-
no, comenzó en la playa; una vez más, las
ganas y el entusiasmo, caracterizó cada
una de las actividades.
Luego del almuerzo y el descanso, se
realizaron tres instancias de taller con
aportes de algunas de las instituciones
participantes, “El acceso a las tierras para
mujeres jóvenes” presentado por Natalia
Vibel del Instituto Nacional de Coloniza-
ción, “Participación y rol de las mujeres
en las organizaciones rurales”, orientado
por Patricia Rodríguez de Comisión Na-
cional de Fomento Rural y “Taller de la
felicidad”, realizado por Marcela Cuadrado
y Mariela Tejera de ASSE-RAP-Canelones.
Los talleres brindaron la posibilidad de
profundizar en cada uno de los temas, en
un clima participativo y siendo muy posi-
tivamente valorado por las participantes.
El tercer y último día, conmemoramos
el día de la “NO violencia hacia la mujer”.
Decidimos trabajar desde los valores que
fortalecen la convivencia, el respeto por el
otro, el fortalecimiento de la autoestima, el
valor de uno y del conjunto, el amor, la con-
fianza, la cooperación, el cuidado del otro y
de uno mismo y la amistad, que generamos
también a partir del encuentro.
Se culminó con el almuerzo, de la mano
de otra de las personas que se puso el equi-
po al hombro en esos quehaceres, Beatriz,
otro pilar que junto a 23 personas más hizo
posible que esta experiencia de campa-
mento fuera un éxito.
Reflexiones de las participantes
A modo de resultado de esta experien-
cia, nos parece interesante compartir con
los lectores, algunas de las reflexiones
que pusieron en común las propias parti-
cipantes. Estas, dan cuenta sin duda, de la
importancia y el significado que propues-
tas de este estilo, las que quizás en otro
contexto pueden parecer simples, tienen
sin embargo para muchas mujeres rura-
les. Estas mujeres que, por la realidad de
su día a día, su trabajo, sus responsabili-
dades, sus posibilidades, valoran en for-
ma particular la oportunidad de un dis-
poner de un tiempo propio para pensar y
pensarse, disfrutar, encontrarse con otras,
compartir, coincidir y disentir, aprender,
aportar y recibir de sus pares.
Esta experiencia nos ha dejado muchos
aprendizajes, vivencias, sentimientos, ale-
grías y la sensación de la tarea cumplida,
al haber alcanzado con éxito los objeti-
vos propuestos. Un grupo de 24 personas,
comprometidas, con un sentido claro de
la cooperación y mucho corazón, conven-
cidos siempre en encontrar una solución
ante cada dificultad, permitió superar la
inexperiencia para lograr esta aventura.
Esperamos que este granito de arena,
tenga sus frutos más allá de estos tres
días, que el entusiasmo y las ganas per-
duren y que en breve poder revivir esta
experiencia en otras versiones de este
lindo campamento.
El agradecimiento especial a Silvia Páez
y Oscar Cuesta en la colaboración para la
redacción de éste artículo.
Equipo organizador:
Martin Clavijo, Mariela
Tejera, Chaquelin Marenco, Luciana Romano,
Griselda Rodríguez, Santiago Lombardo, Patri-
cia Rodríguez, Cristina Ramos, Cristina Revetria,
Marcela Cuadrado, Mirta Nieves, Silvia Páez,
Isabel Olivo, Rosario Ruétalo, Isabel Malanga,
Andrea Fernández, Marcelo Andrada, Yolanda
Britos, Yolanda Martínez, Mabel Ceppa, Mariela
Santos, Lujan, Gonzalo y Juan Carlos de grupo de
Jóvenes de Toca y Pasa, Beatriz y Oscar Cuesta.
Foto: Plan Agropecuario
Apreciaciones de las protagonistas
“Me sentí muy bien, estoy muy agradecida con todos/as, me voy de este campamento muy
fortalecida y con ganas de seguir aún con más fuerzas”
“Me sentí maravillosamente feliz”
“Gracias a la organización por dejarme ser parte de esta experiencia; desde un punto dife-
rente me enseñaron que juntos podemos y que yo sí puedo”
“La organización inmejorable, nada que agregar, estaban cuidados todos los detalles, nos
brindaron un cariño y una atención increíble, todos pusieron la mejor buena onda y de-
dicación”
“Me sentí muy a gusto, muchas con fraternidad, una amistad como si nos conociéramos
de toda la vida. Con muchas ganas que se repitan estos eventos.”
“El grupo muy feliz, muchas ganas de disfrutar, muy unidas”
“Sin pensar en enfermedades, si en volvernos a ver muy pronto”
“Un enorme gracias, me han hecho muy feliz, me han hecho llorar de alegría y emoción”
19