El rol de la siembra sin laboreo en los sistemas
agrícolas ganaderos de los próximos años
 
 
Ing. Agr. Oswaldo Ernst
Facultad de Agronomía (EEMAC)

Introducción

    La siembra sin laboreo de cultivos anuales y pasturas puede considerarse como uno de los principales cambios tecnológicos de la agricultura de los últimos años. Esto es válido tanto como técnica integrada al paquete tecnológico de cada cultivo, como para el sistema de producción en su conjunto.
    La investigación desarrollada en el tema ha sustentado su adopción creciente incluso en sistemas de producción animal intensivos, con pastoreo directo a altas cargas.

    El objetivo de este trabajo es analizar los cambios producidos en los sistemas de producción agrícolas-pastoriles y las posibles tendencias para los próximos años.

    Este análisis representa la visión general del grupo de docentes de Cereales y Cultivos Industriales de la Facultad de Agronomía, sobre el aporte de la siembra sin laboreo dentro de los sistemas productivos del litoral oeste.

Evolución histórica

    Hasta 1970 la rotación agrícola ganadera puede definirse como "no contemporánea" ya que, sin integrar un sistema planificado, los suelos bajo agricultura se "dejaban descansar" cuando los rendimientos descendían. El residuo de este manejo generalizado del suelo, fue la pérdida de fertilidad natural y la erosión. Esto explica el estancamiento productivo de la agricultura en el período 1950-1970, en los que la producción se basó exclusivamente en el aporte de nutrientes de los suelos.
    La respuesta tecnológica dada al problema fue la implementación de sistemas agrícolas-forrajeros, con un uso intenso del suelo en la fase de cultivos.

    Dentro de la rotación se identifican dos períodos. Durante la fase agrícola basada en el laboreo del suelo, se produce una reducción en la fertilidad (Nitrógeno) y pérdida de estructura del suelo, la que se recupera durante la fase de pastura (Díaz, 1992; García Préchac, 1992). Este ciclo de pérdidas y ganancias, muestra una tendencia decreciente en el tiempo como consecuencia de que las primeras resultan superiores.

    La erosión hídrica y la oxidación de materia orgánica por el laboreo han sido identificadas como determinantes de la tendencia en el largo plazo, lo que se vio favorecido por los extensos períodos de barbechos asociados a la secuencia trigo-trigo.
    La intensificación de la fase agrícola con el doble cultivo, redujo el tiempo de barbecho y con ello, el tiempo de suelo descubierto. La mayor cobertura de suelo y la reducción del número de laboreos, representó un paso positivo en el control de la erosión pero al efecto del laboreo sobre la oxidación de los restos orgánicos, se sumó la quema de rastrojos de los cultivos de invierno.

    La inclusión de la siembra sin laboreo con retención de rastrojos sobre la superficie, aporta solución a ambos problemas, por lo que representa una mejora en la conservación y potencial productivo del recurso suelo.

    En el cuadro 1 se presenta una descripción del uso del suelo para un sistema teórico de producción de 8 años para los distintos períodos analizados.

Cuadro 1. Uso del suelo para distintas intensidades de uso agrícola del suelo (% del tiempo para un período de 8 años)

                                                                           Suelo Desnudo
Período
 laboreo 
 rastrojos 
 cultivos 
 pasturas 
Agricultura continua con laboreo
Hasta 1970
42
8
50
0
Pastura trigo con laboreo
1970 - 1990
25
4
21
50
Pastura doble cultivo con quema de rastrojo
Desde 1990
12
0
38
50
Pastura doble cultivo sin laboreo sin quema
Desde 1995
0
12
38
50
Agricultura continua sin 
laboreo y sin quema
¿?
0
24
76
0

    El pasaje de agricultura continua a rotación pastura-cultivos sin laboreo, eliminó el tiempo en barbecho y el laboreo (erosión y oxidación), por lo que podría plantearse la eliminación de las pasturas como componentes centrales del sistema productivo. Esto no representaría un paso atrás en la solución del problema central detectado en el sistema, ya que no modifica el tiempo de suelo descubierto ni implicaría un incremento en la oxidación de la materia orgánica del suelo. Sin embargo, una vez superado el problema principal, surgen nuevos problemas que es necesario considerar.
 

¿Hacia un nuevo equilibrio?

    Con el laboreo, además de aflojar el suelo, estimular la acumulación de Nitrógeno mineral, controlar malezas, manejar el ingreso y salida de agua, se logran una serie de efectos definidos como secundarios porque en general no son determinantes de la necesidad de laborear. Dentro de estos, los de mayor importancia resultan del manejo de los rastrojos sobre la micro y meso fauna del suelo, las malezas y las enfermedades causadas por hongos.

    En el manejo tradicional, luego de cada cultivo, puede considerarse que el laboreo y/o la quema de rastrojos borran la memoria de cada situación, evitando el contacto de un cultivo con otro, alterando el ambiente de tal forma de evitar la reconstrucción de un nuevo equilibrio. Luego de tres a cuatro años, el sistema tiene una salida (pastura larga) que evita la simplificación del ambiente y la aparición de problemas graves de plagas, malezas y enfermedades.

    El sistema de producción cultivos-pasturas representa un ambiente de producción diversificado, donde se combinan cultivos con pasturas de diferentes edades, composición botánica, existe una entrada de Nitrógeno a través de la fijación simbiótica.
    Estas características del sistema productivo lo asemejan al ecosistema natural, los cultivos están intercalados con pasturas, vegetación natural e incluso fajas empastadas dentro de ellos.

    Al eliminar el laboreo y la quema de rastrojos, desaparecen dos variables de manejo centrales de la fase cultivos, las que representan una salida para los problemas generados por un ambiente simple y homogéneo. Si se sumara la desaparición de las pasturas, probablemente se daría un paso en el sentido no deseado, asemejando nuestro sistema productivo al de las grandes zonas agrícolas del mundo. En esta nueva situación, el ambiente solo podría diversificarse a través de la planificación de secuencias de cultivos.
 

Las malezas como problema

    En el cuadro 2 se presenta las características del enmalezamiento generado por esquemas productivos basados en rotación pasturas-cultivo con laboreo.

Cuadro 2. Enmalezamientos potenciales en agricultura con laboreo
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HISTORIA CHACRA         Nº máximo de especies         Nº de semillas de malezas/m2

Chacra vieja                             5                                         86853

Chacra nueva                          12                                         49141

Pradera                                  13                                         31929

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                                                                                                     (Martínez y Mondino, 1994)

 

    Si se toma la situación de cabeza de rotación y chacra nueva como características del sistema pastura-cultivo con laboreo y la de chacra vieja como agricultura continua con laboreo, el enmalezamiento resulta más diversificado y con menor número de individuos de cada especie al incluir rotaciones con pasturas.
    La información experimental obtenida en sistemas de agricultura continua sin laboreo remarca la importancia de la rotación de cultivos como variable determinante de la tendencia del enmalezamiento y sus problemas

    En la mayoría de los estudios en los que se realizaran evaluaciones comparativas de enmalezamientos asociados a sistemas con y sin laboreo, los resultados indican más altas densidades totales para las condiciones de cero laboreo asociadas a incrementos en el total de especies de malezas gramíneas y algunas perennes.
    En las evaluaciones realizadas en los experimentos instalados en la Estación Experimental "Dr. Mario A. Cassinoni" de la Facultad de Agronomía (EEMAC), la densidad del enmalezamiento resultó similar para los laboreos convencionales y el cero laboreo.

    El manejo del enmalezamiento en estos experimentos no fue homogéneo entre sistemas sino que se intentó adecuar la tecnología disponible a la problemática de malezas que cada sistema presentara y esta puede ser una explicación para los resultados encontrados.
La composición botánica de estos enmalezamientos mostró grandes diferencias.

    En el siguiente Cuadro se destaca la composición en porcentaje del enmalezamiento de acuerdo al sistema utilizado.

Cuadro 3. Composición botánica del enmalezamiento
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                                                Sistemas sin laboreo         Sistemas con laboreo

Enmalezamiento invernal (%)

Cardo                                                     6                                     1

Ambrosia                                                28                                    3

Biznaga                                                  25                                   10

Calabacilla                                               1                                    16

Apio                                                       7                                    14

Lengua de vaca                                        0                                    14

Enmalezamiento otoñal (%)
Cardos                                                   55                                    12

Gramíneas estivales                                  24                                    10

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                                                                                                                                    Fuente: Fernández , G. 1999

 

    Estos resultados resultan coincidentes con lo que se plantea en la bibliografía con relación al tema. El incremento de especies que se diseminan por viento, como el caso de los cardos, fue manejado en forma hipotética desde los comienzos del abordaje de estos problemas y ha sido comprobado en varios estudios.

    En cuanto a las malezas gramíneas, prácticamente todos los estudios sobre composición de comunidades de malezas en sistemas sin laboreos al cabo de 5 a 10 años, cuando se considera estabilizado el agroecosistema, señalan incrementos en las proporciones de estas especies. La mayor habilidad que presentan las semillas para sobrevivir en la superficie del suelo así como la de las plántulas para establecerse en residuos en superficie constituye una de las explicaciones más frecuentemente citada para los aumentos observados.

    Indudablemente las poblaciones de maleza están sujetas a una dinámica diferencial en sistemas de siembra directa y eso determina que se asocien con enmalezamientos distintos. Sin embargo, no puede concluirse que necesariamente se evolucione hacia enmalezamientos más problemáticos en estos sistemas.
    Una dinámica diferente requiere de un manejo diferente. Posiblemente con la generación y ajuste de tecnologías al problema puedan modificarse muchos de los resultados obtenidos al presente.

Los insectos plaga como problema

    Con la eliminación del laboreo se predijo un incremento del problema de plagas de suelo.
    La ausencia de laboreo puede favorecer el desarrollo de algunas plagas, pero a la vez propicia un ambiente favorable para la persistencia de hongos, bacterias y virus controladores de plagas.

    Si bien la siembra directa puede favorecer la evolución de algunos organismos considerados plagas, el aumento de las poblaciones de organismos benéficos es un resultado frecuente en sistemas de laboreo reducido y en los ambientes donde ocurre mayor diversificación vegetal. Puede verificarse que muchas veces la diversidad vegetal de los sistemas de siembra directa son ambiente favorable para el desarrollo de mayores poblaciones de especies polífagas.

    En el caso del gorgojo (Sternechus subsignatus), su incidencia es mayor en los cultivos de soja realizados en siembra directa, cuando comparados con los cultivos laboreados, pero sus poblaciones y daños disminuyen cuando la soja se incluye en una rotación de cultivos que incluya especies en las cuales su ciclo de desarrollo se ve perjudicado.
    Del análisis se desprende que el nivel de problemas a esperar al eliminar el laboreo dependerá del nuevo equilibrio alcanzado, el que depende del grado de diversidad que presente el sistema.

Las enfermedades como problema

    El cambio de un esquema productivo basado en el laboreo y quema de rastrojos a uno sin laboreo y con retención de rastrojos sobre el suelo, determina un incremento en la incidencia de enfermedades causadas por hongos necrotróficos. No es un problema nuevo en nuestro sistema productivo, sino que adquiere una mayor relevancia al desaparecer dos variables de manejo determinantes de la cantidad de rastrojo presente sobre el suelo y la persistencia del mismo en el tiempo.
    La rotación de cultivos y las pasturas como parte del sistema aportan una solución válida al problema.

Los insumos necesarios y el rendimiento de los cultivos

    Existen pocas dudas sobre el cambio en la estructura de costos que implica la siembra de los cultivos sin laboreo (Cuadro 4)

Cuadro 4. Variación de los costos de producción de la siembra sin laboreo/siembra con laboreo. EEMAC 1993-1999.
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                            Herbicidas     Nitrógeno    Otros     Preparación de suelo

1º al 5º cultivo            8.1             2.15         1.08                 0.63

6 al 10º cultivo             3               0.67           1                   0.29

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Fuente: Ernst, Siri, 1997; Ernst, Siri, Figari, s/p

NOTA: No incluye cambio en los costos fijos del parque de maquinaria

 

    El cambio en la estructura de costos entre laboreo y no laboreo entre los primeros 5 cultivos de la secuencia y los siguientes, podría ser considerado como el costo del cambio de sistema.
    A esto debe sumarse la probabilidad de menores rendimientos en los primeros cultivos, concepto que con la información actualmente disponible es sumamente discutible.

    Los primeros resultados obtenidos muestran ventajas para las secuencias de cultivos que, a pesar de no incluir laboreo en ningún momento de la secuencia, mantienen el componente pastura dentro del sistema. El tipo y cantidad de malezas anuales y el aporte de Nitrógeno del suelo aparecen como las causas primarias asociadas a estos resultados primarios.

Lo que todavía no tiene un valor conocido

    El sistema productivo del litoral oeste, ha sostenido una agricultura que duplicó los rendimientos medio de los cultivos en un período de 10 años con un relativamente bajo ingreso de insumos. Las pasturas, a través de la fijación de Nitrógeno y su efecto sobre la conservación del recurso suelo, han jugado un papel preponderante.

    La emisión de gases determinantes del efecto invernadero producto de la actividad agrícola es un tema de creciente relevancia. El aumento de la emisión de anhídrido carbónico desde el suelo provocada por el laboreo, las pérdidas del sistema ocasionadas por la erosión y el costo energético de los insumos necesarios para la producción, forman parte de la evaluación de la sustentabilidad del agroecosistema en el que producimos.

    El manejo de un sistema productivo que mantenga ingreso de Nitrógeno en la fase de pasturas, la reducción de la emisión de gases causantes del efecto invernadero por eliminar el laboreo, la fijación de carbono por acumulación de rastrojos en superficie y la diversidad de componentes del sistema, aparecen como ventajas comparativas importantes que deben mantenerse.
 

Extractado de la exposición en el marco del Foro "El sistema agrícola-ganadero del siglo XXI)